El sábado en Puerto Patriada dos posturas entorno a los derechos al uso , dominio y protección de la tierra y el bosques , se cruzaron marcando y defendiendo firmes posiciones enfrentadas; por un lado un importante grupo de pobladores de la reserva y de otros parajes de la zona que defienden el dominio, uso, y protección de la tierra y el bosque; y por otro, las comunidades aborígenes “Pulgar y Francisco Monsalve” quienes denuncian mediante comunicados sufrir la persecución por parte de los gobiernos, y se autoproclaman desde hace ya un tiempo como comunidades que recuperaron territorio ancestral.
Dichas comunidades aborígenes se encontraron el pasado sábado en un futa trawn realizado en territorio “ Monsalve”, pero esta vez no solo con la presencia de los tradicionales referentes, coordinadores y asesores, ya que en el medio de un conflicto de reclamo territorial , aceptaron la llegada a vivir de una pareja de Puerto Madryn conformada por Claudia Elisabet Sastre y su compañero Tato( datos personales suministrado por vocero de las comunidades mediante gacetilla de prensa), cediéndoles la familia Mansilla una porción de tierra, sin autorización de las autoridades competentes, lo que molesto a los pobladores y vecinos de la región, que consideraron dicha maniobra como “ un atropello y usurpación”, y se apersonaron en el lugar exigiéndole la retirada.
Ambas posturas generaron varias horas de discusión, a tal punto que llegó al lugar personal policial y el propio intendente Mirco Szudruk.
Fue así que el “ futa trawn” terminó pasado el medio día; y la pareja que pretendía instalarse en el lugar, en conveniencia con las comunidades , tuvo que retirar la casilla con la que había llegado la tarde anterior. En el lugar también pudo observarse una camioneta cargada con importantes y valiosas herramientas para realización de pozos para posteo de alambrado, de uso no tan habitual en las chacras de la zona, las cuales se presume iban a ser utilizadas para marcar y alambrar territorio.
Tierra, bosque, fuego: conflicto social
El conflicto social con reclamos y posturas encontradas, como las anteriormente señaladas, se vienen dando en la Reserva de Puerto Patriada desde hace un tiempo, todo relacionado con la tierra, el bosque y el fuego¸ y los derechos que ambas partes defienden y entienden como propios, por un lado las comunidades “ Pulgar y Francisco Monsalve” esgrimiendo derechos adquiridos ancestralmente; y por otro los vecinos ,muchos de ellos hijos y nietos de antiguos pobladores, que viven en el lugar y tienen su arraigo familiar, socio cultural, y laboral en el lugar.
Esta vez, no fue una gota la que rebalso el vaso y provocó la reacción de un importante grupo de pobladores de la región, sino el fuego que arrasó con 4.000 hectáreas , quemó 7 viviendas, puso en riesgo muchas vidas humanas y afecto el desarrollo laboral y económico especialmente de los vecinos como afectados directos de Puerto Patriada, los parajes de el Desemboque, Rincón de Lobos, El Sauzal, parte de Cerro Currumahuida y El Pedregoso, , y el resto de la localidad de El Hoyo; cuyo origen intencional está siendo investigado por la justicia, y la hipótesis social más fuerte apunta a un muchacho, hijo del lonco Lindor Mansilla; por eso la postura , reacción y decisión de los pobladores que afirman estar “dispuestos a defender lo que es de todas las familias que allí habitan, y por naturaleza de gente en general”.
Desde las comunidades mapuches-tehuelches además de denunciar persecución por parte de los gobiernos de turno, afirman que "la única “disputa por tierras” que hay en Puerto Patriada esta relacionada con negocios inmobiliarios bajo la protección de los poderes del Estado", sostiene en gacetilla de prensa un vocero de Coordinadora mapuche tehuelche Trauwleiñ to kom y la coordinadora comarcal Neweiñ antu.
Por su parte el intendente Szudruk, hizo de mediador entre las partes, para evitar mayores problemas, llamándolos al diálogo para poder llegar a un acuerdo consensuado entre todos. Aunque también le dejó en claro a los Mansilla, que hasta tanto el conflicto territorial no se resuelva y las correspondientes mensuras estén aprobadas y realizadas, todo aquel que intente instalarse sin autorización en el lugar estará cometiendo un acto de ilegalidad. Finalmente el intendente le recordó a ambas partes que él, no iba a acompañar ninguna decisión y proyecto que no esté consensuada y aprobada por la mayoría de los pobladores de la reserva Puerto Patriada.
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